El Salvador ajusta su postura sobre Bitcoin y redefine su marco legal
El Congreso de El Salvador aprobó recientemente una reforma a la Ley Bitcoin, propuesta por el presidente Nayib Bukele, en respuesta a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Con 55 votos a favor y solo dos en contra, esta modificación marca un punto de inflexión en la actualidad del Bitcoin en El Salvador. La principal modificación establece que la adopción de Bitcoin por parte del sector privado será completamente opcional, atendiendo a las condiciones impuestas por el FMI para la concesión de un préstamo de 1,400 millones de dólares.
Motivos detrás de la reforma de la Ley Bitcoin
El uso de Bitcoin en El Salvador como moneda de curso legal ha sido limitado en la práctica. A pesar de los incentivos para su adopción, solo una pequeña fracción de comercios aceptó pagos en Bitcoin, y de estos, el 90% convirtió los fondos a dólares de manera inmediata. Esta situación, junto con la necesidad de garantizar estabilidad financiera, llevó al FMI a solicitar ajustes en la legislación.
El acuerdo con el FMI exige que el pago de impuestos solo se realice en dólares estadounidenses y que las actividades relacionadas con Bitcoin en el sector público sean reguladas con restricciones. Con estas medidas, el organismo busca mitigar la volatilidad de la criptomoneda y reforzar la transparencia en el manejo de activos digitales dentro del país.
Impacto y futuro del Bitcoin en El Salvador
A pesar del cambio en la Ley Bitcoin, el Gobierno salvadoreño sigue manteniendo su reserva de criptomonedas. Actualmente, El Salvador posee aproximadamente 6,053 Bitcoin, valorados en alrededor de 590 millones de dólares a precios recientes. Aunque el uso cotidiano de Bitcoin ha disminuido, su papel como reserva estratégica sigue siendo relevante.
En términos de actualidad del Bitcoin en El Salvador, la criptomoneda ya no será obligatoria para los comercios ni para el pago de impuestos, pero su aceptación sigue siendo una opción. La billetera digital Chivo, lanzada originalmente para facilitar las transacciones en Bitcoin, continuará operando, aunque con un enfoque menos obligatorio.
La reforma de la Ley Bitcoin en El Salvador refleja una evolución en la estrategia gubernamental respecto a las criptomonedas, buscando equilibrar la innovación con la estabilidad económica. Si bien la adopción masiva de Bitcoin no se materializó como se esperaba, el país mantiene su inversión en el activo digital, consolidándolo como parte de su estrategia financiera a largo plazo.